has muerto en tu ciencia exacta,
has fungido por sobre la madrugada en tu ultimo suspiro polifónico, y no has callado en tu capacidad de hacerte perdedora de sentido y sueño.
abajo la guillotina botónea sentencio tu ultimo brillo,
y fuiste el bloque venenoso con memoria cautiva, y de nunca reciclar.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario